lunes, 3 de abril de 2017

El arte del tempus



He aprendido a vivir con mi máscara:
ocultar las arrugas, las cruces, los fantasmas,
la mujer que encendió el fuego de mi agonía;
las cenizas de cada ilusión.

He aprendido la semejanza entre
amar la vida y hacer el amor,
pues te amo
y no dormís en mi cama;
te cubro con el manto de la distancia
y seguís desnuda.

He aprendido que, a veces,
la lluvia no te conmueve,
los llantos no son monedas,
lloro como hombre
y no volvés a mi lado,
estoy sentado en tu ausencia
y sigo de pie.

Las noches también me enseñaron
el arte del olvido:

enfrentar el espejo y desconocerme,
ser feliz con mis manos a pesar de sus víctimas.

He aprendido que
                     en realidad
                                no aprendí nada.



De ‘‘Historia del tiempo’’

Omar Ochi




A partir de su ausencia



   La encontré en una calle de Praga y la perdí en todos los bares argentinos. Seguí buscándola. Recorrí los mapas de mi conciencia. Volví a verla en los ojos de otras mujeres. La vi en la risa de una niña sin patria. La confundí con el llanto de una muchacha que sufría en francés. Por más que busqué y creí alcanzar el reflejo de su cuerpo luminoso en mis noches frías, no volví a encontrar en otros labios un sabor semejante al de su último beso. Sin embargo, en este país donde en realidad no hay nadie, sigo inventándola…



De ‘‘Quimeras en el aire’’

Omar Ochi







Clímax



   Llegará el momento en que tus lunas comenzarán a derrumbarse. Te dolerán los pedazos de un mundo roto. Dolerán las cosas que no hiciste. Arderán las noches que encendiste, gozaste y perdiste en una noche lejana. Sentirás que algo atraviesa la puerta más íntima de tu cuerpo y gritarás, llorarás… Pero el llanto sólo durará un instante. Dos manos blancas te mostrarán el niño que ha salido de tu vientre y sabrás que, junto a esa hermosa criatura, el mundo ha vuelto a nacer.



De ‘‘Quimeras en el aire’’

Omar Ochi